
Retos de la Rehabilitación
La rehabilitación es la disciplina de la Arquitectura que pretende la recuperación de una función perdida[1]. El gran reto de la rehabilitación es mantener los valores que definen la edificación y su entorno, y a la vez dotarles de las condiciones de vida moderna.
Para mantener la calidad de vida actual se necesita mucha energía. El consumo energético por persona casi se ha cuadriplicado en los últimos 100 años; en el año 2000 cada persona utilizó una media de 2,3 KW al día en el mundo, mientras que en 1900 fue de 0.6 KW[2]. El uso de combustibles fósiles para calefacción, iluminación y ventilación relacionados con la edificación es responsable del 50 % del calentamiento global[3]. Este efecto produce un cambio climático y una gran inestabilidad regional. Las ciudades van a sentir antes sus efectos, como el aumento de las temperaturas, los problemas de salud debidos a la contaminación del aire o del agua y la escasez de energía (incrementos de los precios de la energía).
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El papel que desempeñan los edificios y las ciudades es fundamental para la consecución del desarrollo sostenible. La vida útil de los edificios es larga y son grandes consumidores de materias primas. Debemos plantear los problemas actuales y futuros y resolverlos de una manera sostenible.
La arquitectura siempre ha contemplado los conceptos climáticos como condicionantes ineludibles en el Diseño Arquitectónico. Vitrubio dijo en De Arquitectura[4]: “El estilo de los edificios debe ser manifiestamente diferente en Egipto que en España, en Pontus y en Roma, y en países y regiones de características diferentes. Una parte de la tierra se encuentra abrumada por el Sol en su recorrido; otra, se encuentra muy alejada de él; y por último, existe una afectada por su radiación pero a una distancia moderada.” Para Virubio el confort y el clima formaban parte del modelo tripartito de firmitas, vetustas y utilitas. En su opinión, los factores medioambientales deberían determinar el emplazamiento de las ciudades, la distribución de las calles y la orientación de los edificios.


Retos de la Rehabilitación
La rehabilitación debe contener los condicionantes energéticos que influyeron en su diseño. La mayor parte de la energía necesaria para calentar, iluminar o ventilar los edificios de arquitectura autóctona proviene de mecanismos y fuentes locales. Las características de esta arquitectura, como la orientación, el tipo de planta y la distribución de ventanas, puertas y chimeneas han sido determinadas por cuestiones energéticas.
El potencial, en términos de contribución al ahorro de emisiones de CO2, que tiene la rehabilitación del cuantioso parque de viviendas existente es muy alto, y consume alrededor del 17% de la energía final en España [5][5]. Se evidencia como una de las estrategias más eficaces para contribuir a frenar el cambio climático, colaborando además en la mejora de la calidad de vida de sus usuarios y de los barrios donde se encuentran.
Actualmente existen dos nuevos “motores” para impulsar la rehabilitación residencial: el gran potencial de ahorro energético que supone y la crisis del sector de vivienda nueva. La rehabilitación energética del tejido construido se ha convertido en una cuestión ineludible contra el cambio climático.
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La rehabilitación debe cumplir con la Normativa vigente; en el apartado b) del artículo 2.4 del Capítulo I del CTE se define las obras de rehabilitación, como “las obras tendentes a lograr la adecuación funcional, entendiendo como tal la realización de las obras que proporcionen al edificio mejores condiciones respecto a los a los requisitos básicos a los que se refiere este CTE (…)
La revitalización urbana debe plantearse en el marco de la discusión sobre la ciudad en su conjunto. La escala más aconsejable es el barrio.
La rehabilitación urbana debe dirigirse no sólo a la protección y conservación del patrimonio edificado, sino a la mejora del medio urbano en todos sus aspectos: físicos, sociales, funcionales, ambientales y económicos.
La situación actual de crisis económica y energética pone en crisis el sistema de acondicionamiento activo.
Hace falta una metodología que sea sensible a todos estos aspecto y Efitres Control la ha elaborado y puesto en práctica con excelentes resultados. Véase Auditorias Energéticas
